Roberto Ruiz alcanzó hace ya un par de años el épico logro de alzarse con una estrella de la guía Michelin al frente de Punto MX, su restaurante mexicano en Madrid. Es el único caso en Europa. Y del todo justificado, por cierto.
Pero vayamos al restaurante. Punto MX ha consolidado una oferta que podríamos comenzar a llamar tradicional dentro de su repertorio, la que hizo de elaboraciones como su guacamole, la cochinita pibil, el tuétano o los pescados zarandeados su bandera. Son todos ellos fruto de una introspección en el recetario mexicano que alcanza una forma de expresión original y vibrante en la distancia, en contacto fructífero y enriquecedor con los productos de la despensa española.
Pero esas elaboraciones no alcanzan a reflejar del todo esa idea de la cocina iberomex que el propio cocinero nos presentaba en ediciones anteriores de Madridfusión. Ruiz es un cocinero en expansión, cuya creatividad necesita expresarse en un lenguaje progresivo, para el que ahora ha ideado una nueva estrategia. Se trata de su menú degustación denominado Evolución Natural, que está compuesto por once elaboraciones y en el cual suelta las riendas de su ingenio, se adentra cada vez más en una cocina mexicana de raíz inconfundible y la actualiza de forma magistral. Más interesante que nunca. Punto MX sigue fiel a sus clásicos en la barra y sorprende con su Evolución Natural en su espacio gastronómico.
Por Miguel Ángel Rincón